FreeBSD es uno de los sistemas operativos UNIX más puros y antiguos que existen. Si bien GNU/Linux tiene una base similar a UNIX, FreeBSD se acerca más al antiguo sistema operativo. De hecho GNU es un clon libre de muchas herramientas de UNIX y cumple al igual que FreeBSD la norma POSIX, pero este último se basa en BSD, un UNIX de la Universidad de California en Berkeley.
Dicho esto, sólo añadir que cada día encontramos más sistemas operativos o distros basadas en FreeBSD y las razones pueden ser varias. La licencia de FreeBSD (BSD) es menos restrictiva que las GNU GPL y puede ser un filón para las empresas que tienen en mente hacer privativo de lo tomado libre y gratuitamente, cosa que no pueden hacer con la GPL, y fue lo que hizo el visionario y oportunista Steve Jobs, quien creó su sistema operativo con las fuentes libres de FreeBSD para luego hacer un sistema super cerrado, privativo.
A pesar de su licencia, FreeBSD nos parece muy atractivo y a decir verdad, es más sólido que GNU/Linux ya que sistema operativo y kernel son integrados desde la base y además usa el formato de archivos ZFS que es muy apreciado allá donde se quiere estabilidad y fortaleza de datos. Dicho estos puntos y algunos más (en mi caso amo el hecho de que apenas hay software privativo para FreeBSD) prefiero GNU/Linux por numerosas razones que no viene a cuento y se han tratado aquí otras veces.
Hoy lo que vamos a ver es instalar FreeBSD y un entorno de escritorio cogido al azar… ah, vaya, KDE Plasma otra vez, mala suerte. Y es que hay que decir que FreeBSD no instala ninguna interfaz gráfica. Al igual que Arch, Gentoo, eso es cosa que tiene que hacer el usuario, pero a diferencia de estas distribuciones GNU/Linux, FreeBSD dota de una instalación asistida.
Lo primero es descargarnos la imagen ISO, de poco más de 970 MB para la arquitectura amd64 desde este enlace. Grabada la imagen, vamos manos a la obra.
Los pasos a seguir son evidentes y muy obvios, por lo que no explicaré demasiado detalladamente cada uno de ellos, porque no hace falta. Basta con ver las imágenes que son descriptivas de todo el proceso salvo alguna puntualización.

Esto es opcional. Puedes dejar marcado Ports (interesante). Si quieres compatibilidad con 32 bits márcalo también.

En sistemas BSD las unidades de disco aparecen como ada0 ada1, etc. Selecciona el disco que quieras usar.
Ahora tenemos la base de FreeBSD pero sin interfaz gráfica. Reinicia el sistema y aparecerá en modo consola. Debes loguearte como root y tenemos un poco de trabajo que hacer. Primero vamos a actualizar.
A continuación instalamos dos cosas que son fundamentales para la interfaz gráfica, Xorg y nano:
Tardará un poco, y después instalamos el entorno KDE Plasma y SDDM:
Esto instalará una serie de dependencias que resultará un entorno Plasma. No hemos terminado, pero estamos cerca, porque así no arrancará la interfaz. Hay un par de cosas que hacer. Escribe:
Guarda con Ctrl + o y Ctrl + x.
Por último, y como sabrás, en FreeBSD no existe Systemd, sino como inicio tiene RC. Tenemos que editar el archivo con nano y añadir estas líneas:

Si se te olvidó crear un usuario, puedes usar la orden de UNIX adduser seguido del nombre de usuario.
¿Te suena?
Y aquí con el entorno LXQt: